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QUE NO SE APAGUE LA LLAMA

QUE NO SE APAGUE LA LLAMA
DE LA ORACION

viernes, 5 de junio de 2009

Clama a mi y yo te responderé

Esta es una de las promesas más valiosas que nos ofrece la palabra de Dios. Y quizas es la que menos caso le hacemos.
Estamos viviendo Dias en que la juventud, incluso la que se llama cristiana se pierde, y retrocede de tal manera a este mundo, que acaban muchos en las fauces del león. El diablo esta decidido a llevarse a los infiernos al mayor numero de jovenes posible. A muchos, aquellos que no creén, ya los tiene bién pillados desgraciadamente. Los envuelve en sus redes, los ciega a la realidad espiritual, y los destruye, por medio de un sin fin de medios.A otros que se levantaron en las iglesias, les da a conocer un poquito de mundo, y estan sin fuerzas para decir ¡¡No!! Se les deja sin medios, e incluso muchos lideres se olvidan de ellos, sabiendo que un dia Dios les pedira cuentas, de cada una de la ovejas que perdieron.
Es tiempo de orar con fervor por la juventud en todas las iglesias. Es el momento de cubrirlos con amor, y de forzarlos a entrar. es el momento no de ir a lo nuestro, si no de estar en los negocios del Señor. ¡Clama a mi y yo te respondere! es una promesa, es una necesidad, es prioritario, si no queremos que miles de jovenes se pierdan. Las ovejas son del Señor, pero los mayordomos han de contarlas, y no dejar que dia tras dia, mengue el rebaño por causa del lobo. El diablo viene para robar matar y destruir y si no somos diligentes, nos ganará la partida.
A la juventud hay que animarla a asistir a las reuniones. Y ellos necesitan, temas especificos, que les preparen para afrontar el dia a dia de la realidad. Hay que tener con ellos reuniones especiales, donde ellos se sientan amados, y no solamente parte de un gran edificio. ¿Donde están los que lloran por ellos? ¿Donde los que luchan, los que han recibido el llamamiento de Dios para compartir sus sufrimientos?
Es bién cierto, que en un cuerpo hay muchos miembros y cada uno tiene una función especifica, y aquellos que han recibido este llamamiento, tinen que ser apoyados en su labor, no reprendidos, ni acusados, ni menospreciados. Dios le hace mirar a cada uno de sus siervos hacia un lugar especifico, y a unos le dice mira aca, y a otros mira allá, pero cada uno segun la visión y el llamamiento, trabajara, para el bién del reino.
Hay miles de jovenes que están esperando, un abrazo, de sus padres, de sus lideres, pero en lugar de eso reciben indiferencia, y egoismo, de tal manera que acaban huyendo del redil. Mi oracion es que Tu Padre celestial, los guardes, los rodees con tus brazos, y los protejas. Sacalos de toda inmundicia, santificalos, y llena sus corazones de pasión por ti. Ayudame a mi personalmente Dios del cielo, ha obedecerte y hacer tu voluntad en el nombre de Jesús Amen. Luis M. Quiros